Sábado del Consuelo

Todo el pueblo católico se encuentra a la expectativa de vivir una semana santa más y me permitiré denotar lo que se vive un día antes; un viernes de dolores. En la ciudad de Guatemala es un día laboral como cualquier otro, algo peculiar es el desfile bufo que sale a las calles de la zona 1 a manifestar su rechazo por cuestiones políticas y sociales, esto es originado por la Honorable Huelga de Dolores de la Universidad de San Carlos de Guatemala. Eso es una expresión de la voz popular de un grupo de personas que es representado por estudiantes y académicos de esta universidad pública de estudios universitarios.

Llegando la noche del viernes de dolores en zona 1, todo cambia el pueblo católico se apodera de las calles cambiando radicalmente de lo que se vive en el desfile bufo. ¿Esto por qué?

En la mayoría de las iglesias se encuentran con actividades de fe popular que conlleva a velaciones en los altares mayores de las iglesias donde ponen la imagen de la Virgen María, por otra parte, se escucha marchas fúnebres, se degusta la variedad de platillos de comida tradicional afuera de las iglesias y no puede faltar la reunión entre familia y amigos para conversar de todo tipo de temas.

El día avanza y finaliza, dando paso a vivir un Sábado del Consuelo. La procesión está planificada salir a las 10 de la mañana. Siempre han eventos o circunstancias que pasa un devoto cargador para poder organizar su tiempo y estar en su turno, caso que me paso en este año dado que tengo una responsabilidad muy fuerte en el ámbito de la educación superior y analicé todos los escenarios posibles para poder estar en mi turno, lastimosamente las cosas nunca salen como uno quiere y fui muy consciente de la situación.

Entre en oración (es lo mejor que uno puede hacer) y uno ve los milagros y la forma amorosa que Dios hace para que todo salga bien, así que mi corazón se puso feliz porque tenía una alternativa de llevar a mi amado nazareno del Consuelo por la noche; así que cumplí con mi responsabilidad de formación y de llevar en hombros a Jesús del Consuelo.

Ver la mirada de Jesús del Consuelo es algo fuerte y uno se queda sorprendido al sentir la intensidad. El mensaje de la alegoría del anda está tomada del Apocalipsis 3:20 “He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo. Al que venciere, le daré que se siente conmigo en mi trino, así como yo he vencido y me he sentado con mi Padre en su trono. El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias”.

Hay muchas historias y hoy estaré compartiendo brevemente esas historias que uno vive con todo el fervor cuaresmal. Puedo trasmitir en estas palabras que el Sábado del Consuelo es un día muy especial para mi vida y mi familia, tener un encuentro con Jesús del Consuelo es una bendición y permanente de estar ese día con Él.

La mañana y parte del Sábado del Consuelo transcurrió rápidamente hasta llegar al momento de poder arreglarme y partir a zona 1 para vivir ese encuentro especial que añoro año con año. Llegue a tiempo a mi turno, aunque hay que tener cuidado en zona 1 al momento de tomar calles que no estén bloqueadas y buscar parqueos que estén disponibles, todo esto es una faena.

Me dirigí sobre la 12 calle y el ambiente era desbordante, considerando que, Jesús aún venia lejos. A los minutos el cielo empezó a oscurecerse dando paso a las primeras gotas, posterior la lluvia se hizo presente. Justo estaba en un lugar donde la pestaña del comercio me cubría de la lluvia y dispuse esperar ahí.

Al momento de tomar mi turno la lluvia ya había dejado de cesar y la noche se hacía presente; me formé en mi turno y vi a mi amado nazareno. No hay una explicación de lo que se vive, pero mi piel se enchino y mi corazón emocionado de poder estar ahí.

Al tomar el turno unos hermanos de la hermandad dispusieron subir al anda y quitar el plástico que cubría a la imagen consagrada para que todo el pueblo católico tuviese ese encuentro con Jesús y contemplar su mirada.

Fotografía tomada por mi autoria.

Suena el timbre, tomo mi brazo, oración y caminar en penitencia ayudando a Jesús a cargar la cruz y vivir ese encuentro personal y escuchar al fondo la marcha fúnebre Consagratta.

Jesús del Consuelo ¡bendícenos!

Fotografías obtenidas de la página oficial de la Hermandad C.I. Jesús Nazareno del Consuelo y Asociación Cruzados del Santo Sepulcro.

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