La transformación de los métodos de pago es cada vez más disruptiva, el dinero físico ha quedado atrás, pero para Guatemala es una opción vital para satisfacer la necesidad de algunos agentes económicos.
Es claro que hasta la banca se ha transformado a ser más digital y satisfacer la necesidad de las nuevas generaciones como lo es la inclusión de pagos sin contacto, la Inteligencia Artificial y el blockchain.
Estás nuevas disrupciones giran a ser más confiables para las personas y que la experiencia sea simple y rápidas.
Estás nuevas tendencias, son:
- Uso de IA en las actividades financieras. Implementar un detector para identificar transacciones que podrían presentar un peligro.
- Herramientas digitales para las Pymes. Los emprendimientos aprovechan todas las alternativas que generen valor y a consto menor.
- Inclusión digital. En Centroamérica las billeteras digitales son consideradas una alternativa. Esto genera ecosistemas digitales intuitivos y confiables.
- Identidad. La confianza es la parte más importante de la economía digital.
- Pagos más agiles. Las tarjetas virtuales son una opción innovadora y que sigue creciendo.
- Nueva era para el checkout. La incorporación de la red de buses al pago sin contacto es una opción.
- Pagos en tiempo real. Los pagos en tiempo real (RTP, por sus siglas en inglés). Los sistemas de pagos inmediatos están ayudando a los consumidores a recibir ingresos y realizar transferencias al instante.
- Ecosistemas colaborativos. La innovación ya no es un tabú y no se debe de aislar.
- Blockchain. Es una herramienta que apoya a la evolución más allá de las criptomonedas, que buscará transformar los pagos B2B y el comercio global.
- Tokenización. Es un punto clave para eliminar los datos de tarjetas.
En los próximos años, la humanidad estará enfrentando un cambio radical en las actividades personales y profesionales. Llego el momento de empezar a ser parte de este cambio.
